En el mundo de la gastronomía y la repostería, pocas parejas han logrado impactar tanto como Alejandra Rivas Gómez y Jordi Roca.
Este dúo ha reinventado la forma en que entendemos los postres, combinando la pasión, la creatividad y un enfoque único hacia la innovación culinaria.
En este artículo, exploramos la trayectoria de esta pareja excepcional, su filosofía y sus contribuciones al arte culinario.
En el texto
✦ ¿Quién es Alejandra Rivas Gómez?
Alejandra Rivas Gómez, conocida cariñosamente como Ale, es una destacada repostera de 36 años (a partir de 2023) nacida en Guadalajara, México.
Desde temprana edad, Alejandra mostró un profundo interés por la cocina, influenciada por su abuela y su madre, quienes, aunque no se dedicaban profesionalmente a este arte, eran excelentes cocineras y le inculcaron la pasión por los fogones.
Su formación académica comenzó en la Escuela Único de Alimentos y Bebidas en Guadalajara, México, donde estudió alimentos y bebidas.
La carrera de Alejandra Rivas Gómez tomó un giro significativo cuando realizó un curso que incluía una etapa de prácticas en España.
Esta experiencia fue decisiva en su vida, ya que durante su estancia en las cocinas de Martín Berasategui, descubrió su verdadera vocación por la alta gastronomía.
Gracias a ello siguió formándose en diversos restaurantes en España, tanto en Tarragona como en Valencia, explorando diferentes aspectos de la cocina y la pastelería.
Uno de los hitos en su carrera fue su llegada a El Celler de Can Roca, donde inicialmente comenzó en la cocina salada y, posteriormente, se especializó en la pastelería.
En este reconocido restaurante, Alejandra ascendió hasta convertirse en jefa de la partida de postres, un rol que le permitió observar de cerca y aprender de la pasión y la creatividad que Jordi Roca, el menor de los hermanos Roca, aplicaba a sus creaciones.
Después de finalizar sus prácticas, regresó a México, donde fue invitada por Enrique Olvera a unirse a su equipo, encargándose de la pastelería.
Esta oportunidad marcó su primer gran reto personal y resultó ser una experiencia inolvidable, ya que le permitió ser la creadora de sus propios postres.
Tras su paso por México, regresó a Girona, España, donde, junto con Jordi Roca, iniciaron Rocambolesc, una heladería innovadora que revolucionó el concepto tradicional de helados, combinando sabores únicos con presentaciones creativas y sorprendentes.
✦ La historia de Jordi Roca
Jordi Roca Fontané, nacido el 2 de mayo de 1978 en la ciudad de Gerona, en España, se ha establecido como un ilustre chef de repostería.
Este renombre se debe en gran medida a su labor en El Celler de Can Roca, un afamado restaurante que dirige junto a sus hermanos.
Su habilidad y empeño en el ámbito de la repostería le han merecido un reconocimiento a nivel mundial, destacando su designación como el Mejor Pastelero del Mundo en el año 2014 por “The World’s 50 Best Restaurants”.
Criado en un ambiente culinario gracias a su herencia familiar, Jordi eligió un camino diferente al de sus hermanos, concentrándose en la pastelería en vez de la cocina tradicional y la enología.
Inició su educación profesional en la repostería en 1997 en la Escuela de Pastelería de Girona, un paso decisivo que lo encaminaría a convertirse en uno de los chefs de repostería más sobresalientes tanto en España como a nivel internacional.
Su trayectoria profesional en El Celler de Can Roca comenzó ese mismo año, tras completar sus estudios en hostelería.
Inicialmente, trabajó bajo la supervisión del pastelero Damian Allsop de Gales, para luego en 2000 tomar el control total de la sección de repostería del restaurante.
En 2001, Jordi innovó con la creación de “Viaje a la Habana”, un postre revolucionario que integró el humo de un puro habano, un logro destacado en su carrera.
A lo largo de los años, Jordi ha sido reconocido con múltiples premios, incluyendo el de Mejor Pastelero del Año en 2003 por la guía Lo Mejor de la Gastronomía.
En 2014, fue nombrado Mejor Pastelero del Mundo por 50 Best y, junto con sus hermanos, recibió el Premio Nacional de Gastronomía, reflejando su aporte vital a El Celler de Can Roca, que ha sido calificado como uno de los mejores restaurantes del mundo y ha mantenido sus tres estrellas Michelin.
Además de su trabajo en El Celler de Can Roca, Jordi ha explorado otros horizontes, incluyendo la heladería Rocambolesc, un proyecto en colaboración con Alejandra Rivas Gómez.
Los helados de Rocambolesc capturan la misma esencia creativa y pasión por los sabores distintivos de sus postres en El Celler.
Jordi también ha participado en el programa televisivo “Azúcar arte” en Canal Cocina, donde comparte su conocimiento y habilidad en la repostería.
En 2016, Jordi enfrentó un desafío personal significativo al desarrollar distonía, un trastorno neurológico que le causó una afonía duradera de siete años. A pesar de este revés, continuó con su labor, y recientemente ha recuperado la voz, mostrando su fortaleza y dedicación a su arte.
✦ Alejandra Rivas y Jordi Roca: una pareja de éxito
La historia de amor entre Alejandra Rivas y Jordi Roca es una fusión perfecta de pasión, creatividad y gastronomía.
Esta pareja, conocida por su impacto en el mundo culinario, ha tejido una relación que trasciende lo personal y se extiende a lo profesional, creando un legado único en la repostería y la cocina.
La talentosa cocinera mexicana Alejandra Rivas Gómez y Jordi Roca, reconocido como uno de los mejores pasteleros del mundo, se encontraron en el contexto de la alta gastronomía.
Alejandra, con 27 años en ese momento, había llegado a España desde México después de haber conseguido una beca para trabajar con el chef Martín Berasategui en San Sebastián.
Fue durante esta etapa de su carrera cuando recaló en El Celler de Can Roca y se encontró con Jordi, quien sería no solo su mentor en la pastelería, sino también su futuro compañero de vida.
⌦ Un amor forjado en la cocina
La relación de Jordi Roca y Alejandra Rivas Gómez es un ejemplo de cómo el amor y la profesión pueden entrelazarse de manera armoniosa.
Se conocieron y se enamoraron en la escuela de hostelería de Girona, y desde entonces, han sido inseparables, tanto en la vida personal como en la cocina.
Trabajando codo a codo en El Celler de Can Roca, han combinado sus talentos y conocimientos para crear experiencias gastronómicas únicas, evidenciando la dedicación y el apoyo mutuo en cada creación.
⌦ La boda más dulce
La pareja se casó el 28 de octubre de 2012, en una ceremonia descrita como “La boda más dulce”.
El evento, celebrado en una hermosa masía en las afueras de Girona, reflejó perfectamente su pasión compartida por la gastronomía.
Alejandra lució un traje de Rosa Clará, y el banquete estuvo a cargo del restaurante familiar, con postres creados por los mismos novios.
Este enlace no solo consolidó su amor, sino también marcó el inicio de una colaboración culinaria que continuaría floreciendo.
⌦ La pareja en la actualidad
En la actualidad, Alejandra está al frente de Rocambolesc, una heladería nacida de la visión de Jordi de revitalizar el clásico carro de postres del restaurante de su familia.
Rocambolesc representa más que una simple heladería; es la manifestación tangible de la creatividad y el fervor que Jordi y Alejandra comparten.
Su unión trasciende lo personal y se revela en cada aspecto de este proyecto, transformándose en una experiencia culinaria que rememora la magia de la fábrica de Willy Wonka.
En resumen, la historia de Alejandra Rivas y Jordi Roca es un relato de amor, creatividad y éxito compartido.
Su relación, forjada en la cocina y solidificada en la vida, ha dado como resultado una colaboración que ha dejado una huella imborrable en el mundo culinario, demostrando que la pasión por la gastronomía puede ser, en efecto, el ingrediente secreto del amor.